viernes, 31 de enero de 2014

Actuemos: Lo que cada uno podemos hacer.

Al tantas veces comentado  avance del paro entre nosotros debemos añadir el hecho de que la población activa (suma de personas con trabajo y personas que buscan trabajo) está disminuyendo muchísimo (los datos del gráfico son de Euskadi), especialmente en los últimos meses, como consecuencia probablemente de dos factores: la emigración de nuestros jóvenes para encontrar trabajo fuera y el regreso a sus países de parte de las personas inmigrantes llegadas en la última década. 
Y así las cosas la situación se hace realmente muy grave. Donde no se trabaja  o se trabaja tan poco ¿De qué se vive?
Una comunidad no se sostiene solo con pensionistas, prejubilados o perceptores de la Renta de garantía social, porque el paro se ha más que duplicado. Y las personas que no tienen o pierden un puesto de trabajo, buscan otro con muy  poca esperanza... o no buscan. 
Y la vida no se saca adelante con criticas aceradas en las tertulias del bar con los amigos. A los que si tenemos un empleo habría que decir que la cosa también va con nosotros. Aunque nosotros no lo hayamos causado, las personas que aún disponemos de un trabajo y de unos ingresos para vivir dignamente podemos hacer cosas tanto como los que se van quedando descolgados.

Somos de los que creemos que cada día, cada persona debe de hacer algo para mejorar lo que no desea para él y los que le rodean. Y no nos referimos a las instituciones. Después de ver que solo en Bizkaia se han incorporado 60.000 personas a las listas del paro desde 2007 y que nadie ha dimitido por ello, no tenemos  duda de que no podemos confiar en las instituciones y quienes las dirigen, de que nos toca hacer algo a cada uno de los ciudadanos, o todo está perdido.

Por pensar en alto, los que aún tenemos trabajo:

  • Tenemos la responsabilidad de evitar las horas extras, pagadas o no pagadas.
  • Debemos presionar a nuestros representantes sindicales, incluso participando en los sindicatos, para que impidan la eliminación de puestos de trabajo en empresas con beneficios, incluso cuando las condiciones ofrecidas por los propietarios sean razonables para quienes se van. Debemos asimismo de presionar a quienes elegimos a nivel local  para la exigencia de creación de empleo entre los vecinos cuando haya necesidades en el pueblo.
  • Debemos mentalizar en situaciones extremas a nuestros/as compañeros/as de trabajo sobre el mantenimiento de los puestos de trabajo, incluso renunciando a parte de nuestra remuneración. 
En cuanto a la creación de empleo, pensamos que  debemos orientar los esfuerzos y nuestros recursos al impulso a nuevas formas de economía:

1. Implicarnos  en nuestro entorno:
  • Una cosa muy sencilla y a la vez muy importante es hablar con nuestros vecinos/as, conocer algo de sus vidas y escucharles. Involuclarnos en las movidas del barrio y del pueblo.
  • Hacer un esfuerzo por conocer la situación de las empresas de nuestro entorno.
2. Fortalecimiento de la economía local y productiva:
  • Comprar la mayor cantidad de productos posibles en los comercios más cercanos a donde vivimos.
  • Adquirir productos hechos o cultivados en nuestro entorno.
  • Evitar en la medida de lo posible la intermediación, adquiriendo los productos directamente al fabricante o productor.
3. Puesta en marcha de iniciativas de intercambio:
·         Hablamos de iniciativas muy diversas como el truequeregalos de productos que no utilizamosbancos de tiempo, etc... Por cierto, el movimiento 15M está lanzando algunas de estas iniciativas con el fin de complementar la acción más política de las asambleas de barrio con la construcción de un nuevo modo de entender la sociedad y las relaciones ciudadanas. ( ver esta entrada que hicimos en su día). La utilización de Internet en el desarrollo de estas iniciativas nos parece casi indispensable pero  es conveniente mantener actividades de cercanía en las que las personas puedan reforzar el sentimiento de comunidad  y de solidaridad concreta. 

4. Fortalecimiento de la economía ética, solidaria y comunitaria:

·  Adquirir productos de comercio justo y apoyo a las organizaciones que los comercializan.En Ortuella por ejemplo tienes un grupo que se organiza en torno a Kidenda.
·    Implicarse en la banca ética.
· Participar en actividades de financiación compartida (crowdfounding). Os dejo dos ejemplos: una iniciativa de agricultura ecológica y una web de apoyo a proyectos de artistas innovadores.
·   Apoyar a entidades de lucha contra la exclusión, reciclaje y sostenibilidad, entregando o adquiriendo los productos que gestionan. Otro par de ejemplos: Emaús y Koopera o en Ortuella el proyecto Comparte.
·     Otras iniciativas empresariales de más alcance: ner group y la economía del bien común.

Seguro que otras personas podéis completar tanto las reflexiones iniciales como las propuestas, comentando cosas que vosotros hacéis o creéis que se pueden hacer. Nuestro objetivo escribiendo esto no es sino  animarnos y animaros a ir construyendo desde abajo una vida que merezca más la pena. Opinar en un blog , en twitter o en facebook es limitado o sirve para expresar nuestra indignación , pero la voz de cada cual en su txokito no cambia las cosas y tanto grito queda muy pero que muy perdido en la red. La situación pide hacer y si es posible hacer con.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si quieres cambiar algo, sé parte del cambio, implícate, participa, difude. Desde fuera mirando sólo adquieres el vicio de la crítica.